Policía australiana califica de acto "terrorista" el apuñalamiento en una iglesia de Sídney
La policía australiana afirmó el martes que el apuñalamiento ocurrido la víspera en una iglesia asiria de Sídney fue un acto "terrorista" con motivaciones religiosas y llamó a la enfurecida población local a la calma.
El atacante fue inmediatamente sometido por un grupo de fieles, antes de ser detenido por la policía.
En la agresión, ocurrida el lunes por la noche, resultaron heridos el obispo, el atacante y otras tres personas.
Una transmisión en directo mostró el ataque. En las imágenes, se ve a un hombre acercándose al altar, con un cuchillo en alto, y luego atacando al párroco, desatando el pánico entre los feligreses.
Los hechos ocurrieron en la iglesia del Cristo del Buen Pastor, situada en Wakeley, un suburbio al oeste de Sídney, según el video al que la AFP tuvo acceso.
El barrio alberga a miembros de la pequeña comunidad cristiana asiria, huidos de las persecuciones y de la guerra en Irak y en Siria.
El obispo, que fue apuñalado en la cabeza y el abdomen, está estable y su salud "mejora", informó la iglesia este martes.
"Después de considerar todo el material, declaré que fue un incidente terrorista", indicó este martes en conferencia de prensa la comisaria del estado de Nueva Gales del Sur, Karen Webb.
Precisó que se trató de un acto de "extremismo" con motivaciones religiosas y que las víctimas "tienen suerte de estar vivas".
Según la comisaria, el sospechoso era "conocido por la policía" pero no figuraba en ninguna lista de vigilancia terrorista.
- "Acto individual" -
"En este punto parece que fueron acciones de un individuo", afirmó Mike Burgess, jefe de la Organización Australiana de Inteligencia de Seguridad.
"Nada indica que nadie más estuviera implicado, pero la investigación sigue abierta", añadió, apuntando que no hay motivo para elevar el nivel de amenaza terrorista en el país.
El sospechoso sufre heridas en la mano y fue llevado a un lugar seguro.
Además del párroco, otras tres personas sufrieron heridas leves.
Tras el ataque, más de 500 manifestantes se enfrentaron durante varias horas a la policía antidisturbios, que los contuvo para impedir que ingresaran a la iglesia a linchar al adolescente detenido.
Veinte vehículos de la policía y algunas viviendas fueron dañadas por los manifestantes, que lanzaron botellas, ladrillos y otros objetos.
La situación se calmó por la noche pero la policía desplegó patrullas adicionales en el barrio para proteger los edificios religiosos.
Según la policía, la muchedumbre expresó "una respuesta emocional a lo que se produjo en la iglesia", después de cundieran varios rumores, que no precisó, por internet.
El jefe del gobierno de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, lanzó un llamado a la calma en un comunicado conjunto con las autoridades cristianas y musulmanas.
"Llamamos a todo el mundo a actuar con bondad y respeto hacia el prójimo", escribieron. "Es el momento de mostrar que somos fuertes y que estamos unidos".
Los asirios tienen sus raíces en un imperio que gobernó parte del antiguo Oriente Medio.
Desde la época de ese imperio, han sido víctimas de persecuciones como minoría religiosa y étnica, distinta a las mayorías árabes y musulmanas de la región.
El ataque se produjo después de que, el sábado, otra agresión con arma blanca dejara seis muertos -cinco de ellos, mujeres- en un centro comercial de Sídney. En ese caso se descartó el móvil terrorista, pues el autor --que fue abatido por la policía-- sufría una enfermedad mental.
M.Hernández--ESF