Tres muertos en represión de manifestaciones en Irán
Las fuerzas de seguridad iraníes dispararon este jueves mortalmente contra tres manifestantes que protestaban por la muerte de Mahsa Amini, al día siguiente de importantes conmemoraciones para marcar los 40 días desde su fallecimiento bajo custodia policial.
Las fuerzas de seguridad abrieron fuego en la ciudad occidental de Mahabad y mataron al menos a tres personas, informó el grupo de derechos humanos Hengaw.
Según la oenegé, una multitud rodeó las oficinas gubernamentales después del entierro de un manifestante de 35 años, Ismail Mauludi, que murió la víspera cuando la multitud se dirigía hacia las oficinas del gobernador.
"No deberíamos de llorar a nuestros jóvenes, deberíamos vengarlos, gritaban los manifestantes, según la ONG, con sede en Noruega.
Irán vive la mayor ola de protestas en años, lideradas por mujeres jóvenes que desafían a las fuerzas de seguridad quemando sus velos.
El movimiento se desencadenó tras la muerte de Mahsa Amini, una joven kurda iraní de 22 años, el 16 de diciembre, tres días después de haber sido detenida en Teherán por la policía de la moral, por supuestamente no atenerse al estricto código de vestimenta de la República Islámica.
Casi seis semanas después de la muerte de Amini, la movilización, alimentada por la indignación pública tras la represión que se ha cobrado la vida de otras mujeres jóvenes y niñas, no muestra signos de debilitarse.
- "Dividir la unidad de la nación" -
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, afirmó el jueves que los "disturbios" provocados por la muerte de Mahsa Amini allanan el camino a ataques "terroristas".
Sus declaraciones llegan después de que el miércoles se produjera un atentado contra un mausoleo en la ciudad sureña de Shiraz, que dejó al menos 15 muertos. El grupo yihadista Estado Islámico reivindicó el ataque.
Con su declaración, el ultraconservador mandatario iraní parecía vincular las dos tragedias.
"La intención del enemigo es interrumpir el progreso del país, y estos disturbios allanan el camino a actos terroristas", dijo en declaraciones retransmitidas por televisión.
El miércoles, acusó a los "enemigos de Irán" de buscar "dividir la unidad de la nación (...) por la violencia y el terror". También prometió una respuesta severa de las fuerzas de seguridad en reacción al ataque de Shiraz.
El líder supremo, el ayatolá Ali Jameneri, llamó el jueves a la unidad del país para combatir la "conspiración" alimentada por los "enemigos de Irán".
- Manifestaciones en varias ciudades -
A pesar de fuertes medidas de seguridad, miles de personas acudieron el miércoles a la ciudad natal de Amini, Saqqez, en la provincia del Kurdistán, para rendirle homenaje en su tumba al final del periodo de luto tradicional en Irán.
Los asistentes entonaron cánticos en el cementerio de Aichi, a las afueras de Saqqez, antes de que muchos se dirigieran a la oficina del gobernador en el centro de la ciudad.
Según Hengaw, las fuerzas de seguridad dispararon gas lacrimógeno y abrieron fuego contra personas en la plaza Zindan en Saqqez. La oenegé no especificó si hubo muertos o heridos.
La agencia de noticias iraní ISNA dijo que se había cortado el internet por "razones de seguridad", y que casi 10.000 personas se habían congregado en la ciudad.
Al caer la noche, las fuerzas de seguridad dispararon contra manifestantes en Marivan, provincia del Kurdistán, según un video publicado por Hengaw.
No muy lejos, en la ciudad de Bukan, ardían hogueras en las calles y los manifestantes coreaban "¡Muerte al dictador!", indicó la misma fuente.
Los manifestantes también rodearon una base de la milicia Basij en Sanandaj, en la provincia del Kurdistán, provocando incendios y haciendo retroceder a las fuerzas de seguridad, añadió Hengaw.
Hubo escenas similares en la ciudad de Ilam, cerca de la frontera occidental de Irán con Irak.
El jueves hubo también una concentración ante la tumba de Nika Shahkarami, de 16 años, cerca de la ciudad occidental de Jorramabad, 40 días después de que fuera asesinada por las fuerzas de seguridad, según el grupo de derechos humanos HRANA, con sede en Estados Unidos.
La represión de las protestas en todo Irán ha dejado al menos 141 muertos, entre ellos niños, según un balance actualizado de la oenegé Iran Human Rights (IHR), con sede en Noruega.
También ha habido una campaña de arrestos masivos de manifestantes y sus simpatizantes, incluyendo profesores universitarios, periodistas y celebridades.
Según Amnistía Internacional, 23 niños han muerto en la represión de las protestas, 29, según IHR.
A.Abascal--ESF