Pueblo japonés instala una barrera para bloquear una popular vista del monte Fuji
Un pueblo japonés instaló este martes una barrera de color negro para bloquear una popular vista al monte Fuji que atraía hordas de turistas molestas para los vecinos.
Temprano, un grupo de operarios municipales empezaron a fijar la tupida malla de 2,5 metros de altura y 20 de longitud a unos postes metálicos y terminaron el trabajo alrededor de mediodía.
La drástica medida fue anunciada en abril por el ayuntamiento de Fujikawaguchiko, en el centro de Japón, ante las molestias y las actitudes incívicas de numerosos turistas que acudían al lugar.
En este municipio abundan los puntos desde donde fotografiar la emblemática montaña, pero este destaca porque la majestuosa silueta del volcán sobresale por encima de una tienda de conveniencia Lawson, ubicuas en este país.
Esto atraía a numerosos turistas que abarrotaban la estrecha acera frente a la tienda, fumaban fuera de las zonas autorizadas, cruzaban la carretera con el semáforo en rojo o incluso trepaban a la azotea de una clínica dental adyacente para conseguir un mejor plano para sus fotografías.
"Es una pena porque realmente es una fotografía emblemática", lamentó a la AFP Christina Roys, una turista neozelandesa de 36 años que acudió al lugar el martes por la mañana.
"Pero es totalmente comprensible" porque la vista atraía a mucha gente en un lugar "bastante peligroso" con la carretera justo al lado, reconoció.
Desde el levantamiento de las restricciones de la pandemia, el turismo en Japón no para de crecer y alcanza cifras récord.
Pero este flujo de visitantes también genera tensiones con la población local por la cantidad excesiva de turistas o la aparición de comportamientos inadecuados.
Las autoridades están tomando medidas para contener estos problemas.
En el mismo monte Fuji, las autoridades impondrán a partir de este verano una tasa de acceso y una cuota máxima diaria en la principal ruta de senderismo para escalar el volcán.
Y en Kioto se ha prohibido el acceso de los turistas a las callejuelas del barrio de las geishas, después de casos de acoso de los visitantes contra estas mujeres para tomarles una fotografía.
A.Navarro--ESF