En la cima de su disciplina, Armand Duplantis sigue viviendo "un sueño"
"Sigue siendo un sueño": después de haberlo ganado todo, el plusmarquista mundial del salto con pértiga, Armand Duplantis asegura, en una entrevista a la AFP, que continúa "buscando ser aún mejor" para saltar "ese centímetro de más" que podría superar el miércoles en Liévin (norte de Francia).
"Adoro lo que hago. Amo todo lo que rodea este deporte, es tan divertido. Hacer todo esto sigue siendo un sueño", explica el atleta sueco de 23 años, sentado en la pista del estadio cubierto de Liévin.
El temor a la lasitud no existe para este atleta que reina sin oposición en su disciplina, de la que es vigente campeón olímpico, mundial y de Europa.
Sabe que aún está lejos del impresionante palmarés de Serguei Bubka, séxtuple campeón mundial. "Él hizo una mejor carrera que yo... por el momento", sonríe el escandinavo.
En referencia al legendario saltador ucraniano, Duplantis asegura, con una mezcla de osadía y malicia: "Si nos enfrentáramos, creo que le ganaría más veces de las que él me batiría a mí".
Pero cuando salta, no lo hace contra Bubka, sino contra sí mismo. "El objetivo principal es siempre ser mejor que uno, de lo que era antes".
Contra sí mismo, pero también para él. "Tengo la sensación de haber demostrado ya mucho", reivindica. "Ahora ya no tengo la impresión de tener que demostrar lo que sea a quien sea, simplemente tengo que probarme algunas cosas a mi mismo".
En otras palabras, la prioridad es mejorar su récord del mundo. A tal punto que 'Mondo' aún no ha decidido si participará en el Europeo en sala, del 2 al 5 de marzo de Estambul.
- "Llevar este juego a otro nivel" -
Ha batido el récord del mundo en cinco ocasiones. La primera vez fue en Torun (Polonia) el 8 de febrero de 2020, cuando superó el listón a 6,17 m. La última fue en el Mundial de Eugene (Estados Unidos) en julio pasado, con 6,21 m.
Este invierno, Duplantis falló en sus dos intentos de mejorar su récord: en Uppsala (Suecia) el 2 de febrero y en Berlín el pasado viernes. Aunque en ambos casos ganó la prueba sin oposición (con 6,10 y 6,06 m, respectivamente).
"Para pasar 6,22 m, hace falta que todo salga realmente perfecto", admitió en la capital alemana.
¿Qué es un 'salto perfecto'? "¿Quién sabe? Depende", responde con una gran sonrisa, antes de añadir más en serio. "No creo que lo haya logrado ya. Pienso que he estado cerca. Hace falta que esté realmente en el punto, completo, de la carrera a la batida".
"Siempre hay que buscar ser mejor, reflexionar en la manera cómo mejorar, de ir a buscar un centímetro más", insiste.
"Sé que aún tengo margen de progresión en algunos aspectos de mi salto", dice el sueco, convencido de que podrá batir el récord en varias ocasiones en los próximos años "una vez que haya eliminado esas lagunas".
A Duplantis le puede motivar también toda una generación de jóvenes pertiguistas capaz de saltar por encima de los seis metros. "Es genial tener competencia, eso te hace subir el nivel. Cuantos más chicos haya capaces de superar los 6 metros, más me motivará para llevar este juego a otro nivel".
La próxima ocasión para tratar de batir el récord la tendrá el miércoles en Liévin, una pista que aprecia y donde vivió en 2020 "una de las mejores reuniones de mi vida". Ganó la prueba con 6,07 m, antes de fallar en sus tres intentos de lograr el récord mundial, que entonces estaba en 6,19 m.
"Me encanta esta pista, la sensación que tengo y sé que es un lugar donde se puede saltar más alto". ¿Logrará hacer el tan buscado "salto perfecto"?
L.Cabrera--ESF