La diplomacia francesa se rebela contra el fin de los diplomáticos de carrera
Varios sindicatos convocaron una huelga el 2 de junio en el ministerio de Relaciones Exteriores francés, un llamado rarísimo en su diplomacia para expresar su "malestar" por una "avalancha de reformas", como la que pone fin al cuerpo diplomático.
"El Quai d'Orsay [sede de la cancillería] desaparece poco a poco", alertan seis sindicatos, así como un colectivo de 400 jóvenes diplomáticos. En su punto de mira, el fin de los diplomáticos de carrera, la reducción de las actividades consulares o la supresión de puestos.
"Estas medidas (...) son un sinsentido en un momento en que la guerra marca su regreso a Europa", escriben.
La segunda huelga en la historia del ministerio, tras la de 2003 por cuestiones de indemnización, muestra "el malestar real en una casa que sin embargo no tiene una tradición rebelde", asegura Olivier da Silva, del sindicato CFTC.
Francia cuenta con la tercera red diplomática en el mundo tras Estados Unidos y China. El ministerio de Relaciones Exteriores emplea a 14.000 agentes (titulares, contractuales, locales...), según cifras oficiales.
La reforma de la alta función pública que promueve el presidente liberal, Emmanuel Macron, prevé además que los altos funcionarios ya no estén afectados a una administración específica, sino que cambien regularmente a lo largo de su carrera.
"Estamos muy preocupados", aseguró un embajador en ejercicio, que pide el anonimato. "¡No somos intercambiables! Respeto a mis compañeros de otras administraciones, pero yo no sé hacer su trabajo y ellos no saben hacer el mío", agregó.
O.Aceves--ESF