Irlanda pide al Reino Unido que cumpla su palabra sobre Irlanda del Norte
El primer ministro irlandés, Micheal Martin, llamó el viernes al gobierno británico a respetar los tratados internacionales que firmó y a emprender "negociaciones serias" con la Unión Europea sobre las disposiciones posbrexit en Irlanda del Norte, sumida en una crisis política.
"Creo en un orden basado en normas internacionales que respete los tratados internacionales acordados solemnemente por gobiernos soberanos y que no se abandonen arbitraria y unilateralmente cuando le convenga a una de las partes", dijo Martin en rueda de prensa tras reunirse en Belfast con responsables políticos de esa región británica.
La amenaza de Londres de actuar unilateralmente para modificar el denominado "protocolo norirlandés", firmado con Bruselas en el marco del Brexit, provocó airadas reacciones desde Bruselas a Washington.
Londres quiere renegociar a fondo el texto, mientras que la UE solo está dispuesta a hacer ajustes.
Arriesgándose a represalias comerciales por parte de los europeos, el gobierno británico amenazó el martes, tras meses de discusiones infructuosas, con legislar unilateralmente en las próximas semanas para revertir estas disposiciones.
Pese a reconocer los "problemas legítimos" que plantea el protocolo, Martin advirtió que "la única forma de resolver esto es con negociaciones profesionales y serias entre el gobierno del Reino Unido y la Unión Europea".
El protocolo está en un centro del bloqueo político en Irlanda del Norte.
El partido unionista DUP se niega a participar en un ejecutivo regional con los republicanos del Sinn Fein, que ganaron las elecciones del 5 de mayo, mientras se mantengan los controles aduaneros que impone el protocolo entre la región y el resto del Reino Unido.
También se negaron a nombrar un presidente del parlamento autónomo regional, bloqueando de hecho su funcionamiento.
El DUP se mantuvo firme el viernes: "No volveremos plenamente a las instituciones políticas hasta que se tomen medidas decisivas sobre el protocolo", dijo su líder Jeffrey Donaldson.
El protocolo se firmó para proteger el mercado único europeo tras el Brexit sin provocar el regreso de una frontera física entre la Irlanda del Norte británica y la vecina República de Irlanda -país miembro de la UE- y preservar así la paz acordada en 1998 tras tres décadas de sangriento conflicto entre unionistas y republicanos.
Refutando las afirmaciones de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, Donaldson defendió que es el protocolo, y no la posible acción unilateral de Londres, lo que amenaza la paz en Irlanda del Norte.
Pelosi expresó en Twitter su "profunda preocupación" por las intenciones del gobierno británico y advirtió que el Congreso estadounidense bloquearía un acuerdo de libre comercio con el Reino Unido si la paz en Irlanda se ve amenazada.
Estados Unidos fue garante del acuerdo de paz en 1998. Una delegación de legisladores estadounidenses llegó a Bruselas para mantener conversaciones con la Comisión Europea, antes de viajar a Londres, Dublín y Belfast.
M.Hernández--ESF