Comité defiende veto a los bebés en el Parlamento británico
Las diputadas no deberían traer a sus bebés al Parlamento británico, estimó el jueves un informe elaborado por un comité de todos los partidos, pese a la campaña de una representante laborista para mejorar la conciliación entre vida familiar y laboral.
El año pasado, Stella Creasy fue llamada al orden y se le pidió que no volviera a traer a su bebé a la Cámara de los Comunes, tras haber participado en los debates con su hijo, llamado Pip, dormido en sus brazos.
La diputada de la oposición denunció entonces el tratamiento reservado a las mujeres políticas, que concilian trabajo y maternidad.
La cuestión generó debate y el presidente de la Cámara de los Comunes, Lindsay Hoyle, pidió revisar las reglas.
En su informe publicado el jueves, el comité a cargo del tema se decantó por mantener las normas existentes, aunque dejó a la presidencia de la cámara la posibilidad de adoptar las reglas "con parsimonia".
Creasy dijo no sentirse "sorprendida" por esta recomendación.
"Este comité no ha hablado con nadie fuera del Parlamento, aunque muchos de nosotros le hayamos incentivado a hacerlo. No me sorprende que no reconozca que podamos estar desanimadas por estas normas y esta visión anticuada hacia las mujeres que tienen hijos", dijo.
"El cambio no llegará hasta que empiecen a escuchar a los que están fuera del statu quo", añadió.
P.Rodríguez--ESF