Kosovo cierra diez municipalidades serbias, Serbia denuncia una "escalada peligrosa"
Las autoridades de Kosovo cerraron el miércoles instituciones serbias en varias localidades, incluidas municipalidades "paralelas", agravando las tensiones con Belgrado, que inmediatamente denunció una "escalada peligrosa" a medida que se acercan las elecciones legislativas kosovares previstas en febrero.
Esta nueva operación de las autoridades kosovares sigue a otras llevadas a cabo en los últimos meses para desmantelar lo que Pristina considera como "instituciones paralelas" que operan "ilegalmente" en territorios habitados principalmente por serbios.
Se cerraron alcaldías, oficinas de correos, bancos, la administración fiscal y otras que expedían matrículas serbias, y se prohibió el uso del dinar serbio, siendo el euro la moneda utilizada en Kosovo.
Las operaciones anteriores se centraron en las localidades del norte de Kosovo, una región mayoritariamente poblada por serbios. Esta última afecta a las estructuras de Belgrado en las "enclaves" serbias del resto del país.
Ahora solo permanecen en funcionamiento las instituciones de educación y salud financiadas por Belgrado.
Serbia, que nunca reconoció la independencia proclamada en 2008 por su antigua provincia de mayoría albanesa, denunció una "escalada peligrosa".
En total "35 instituciones" que emplean a unas "1.100 personas" fueron cerradas, precisó la televisión privada serbia B92, al inicio de una entrevista con el presidente serbio Aleksandar Vucic.
"Estas personas no se quedarán sin trabajo. Seguirán recibiendo sus salarios y podrán atender las necesidades de sus familias", aseguró Vucic durante la entrevista.
La operación de las autoridades kosovares tiene lugar semanas antes de las elecciones legislativas, convocadas para el 9 de febrero, que serán una prueba para la política llevada a cabo por el jefe del gobierno kosovar, Albin Kurti.
Kurti busca consolidar la soberanía de Pristina en todo el territorio y multiplica los enfrentamientos con Belgrado.
A.Pérez--ESF