EEUU da la espalda de nuevo a las minas antipersona
El gobierno del presidente estadounidense Joe Biden anunció el martes que renuncia al uso o producción de minas antipersona, salvo en la península coreana, revirtiendo así las decisiones de su predecesor Donald Trump.
"Una vez más, el mundo ha sido testigo del impacto devastador que pueden tener las minas antipersona en el contexto de la guerra brutal y no provocada de Rusia contra Ucrania", afirmó en un comunicado Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, un órgano dependiente de la presidencia.
Las fuerzas rusas en Ucrania "utilizan municiones explosivas de manera irresponsable, incluidas las minas antipersona", lo que "afecta en gran medida a los civiles y daña las infraestructuras civiles estratégicas", comentó Stanley Brown, un alto cargo del Departamento de Estado, en rueda de prensa.
Precisa que el objetivo último de Washington es unirse a la Convención de Ottawa de 1997.
Este tratado que prohíbe las minas antipersona fue ratificado por más de 160 países, incluidos todos los miembros de la OTAN, con la excepción de Estados Unidos.
Rusia, China e India tampoco lo han firmado.
El ejército estadounidense no ha usado minas antipersona de manera "significativa" desde la Guerra del Golfo en 1991, precisó Stanley Brown.
A la espera de ratificarlo, Estados Unidos se alinea con gran parte de los compromisos de la Convención de Ottawa, renunciando a usar, desarrollar, producir, vender o fomentar el uso de las minas.
El texto también llama a destruir las minas que los países tengan en su poder.
Pero ninguna de estas promesas estadounidenses se aplica en la península de Corea.
Estados Unidos afirma que tal como están las cosas, adherirse a la Convención de Ottawa no es compatible con los compromisos asumidos para defender a Corea del Sur.
La oenegé Handicap International aplaudió, en Twitter, una "noticia excelente" por parte del gobierno de Biden, pero llamó a Estados Unidos a firmar el tratado de 1997. "Las minas antipersona deberían erradicarse de una vez por todas", insiste.
- Tres millones -
Stanley Brown afirmó que Estados Unidos tiene actualmente unos tres millones de minas en stock. No precisó cuántas destruiría o si las conservaría por si las usa en la península de Corea.
El anuncio del gobierno de Biden resucita una política aplicada por Barack Obama y revertida por Trump.
En 2020 el expresidente republicano levantó las restricciones que pesaban sobre la producción y el uso por parte de Estados Unidos de estas armas respecto a la población civil.
Las minas antipersona, los "restos explosivos de guerra" y las "minas improvisadas" mataron a un promedio de 19 personas todos los días en 2020, según el último recuento del Observatorio de minas.
El número de víctimas en 2020 subió un 21%, debido a la ralentización del desminado provocada por la pandemia de covid-19, según este organismo internacional.
Estados Unidos asegura que contribuye a la erradicación de las minas, con más de 4.200 millones de dólares invertidos en un centenar de países desde 1993 a través de programas de destrucción de armas convencionales.
"Continuaremos con este importante trabajo", declaró Adrienne Watson, y calificó los anuncios del martes de "otro paso en el proceso de restablecimiento" del liderazgo de Estados Unidos en el mundo.
A.Abascal--ESF